La Creación – Los Textos

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Que mejor que iniciar esta sección de Mitologia con un tema que es central y que hace a La Creación, y asi poder recorrer mitológicamente todas lasconcepciones acerca de la misma.

Por nuestra Civilización Occidental y Cristiana, siempre la centralidad lo es la Creación Biblica, la que desarrollaremos como Mito Judio.

Nos ocuparemos de La Creación Biblica, y sus dias, e igualmente la egipcia, la griega, la órfica, la andorogina, la mesopotámica, la azteca, de los mayas, de los Wichi, la Tehuelche, la islámica, la Mapuche, la de los Hopi, la japonesa, la hindu, la babilónica, la nordica, la aricana, la cósmica, la china, y cuantas vesiones de La Creación han sido elaboradas por los hombres, sintindose y colocándose en el centro del Universo.

En este apasionante tema, el que desarrollaremos en una serie de notas al respecto recorreremos, como en su momento lo hice en Recorriendo la Biblia – I Parte, todo lo relacionado con La Creación, y para ello iniciaremos con los Libros Judios que es el Pentateuco, y la apropiación cristiana denominándole a La Creación como El Genesis, que se da como El primer libro de Moises, llegándose en la tradición judeo cristiana a tomar a este personaje como un personaje real e histórico.

En lo particular no es nuestra intención introducirnos en el tema de la historicidad ni de los libros ni de los personajes, sino simplemente, partiendo de la posición de tener esos libros llevar sus textos, sus comparaciones y los análisis críticos y su interrelación con personajes similares, como por simples ejemplos Sargon, Akenaton, y textos similares de civilizaciones anteriores a la elaboración judía.

Así será interesante comparar este Genesis con el Poema de Gilgamesh que igualmente y muchos siglos antes había presentado una Creación con el varon y la mujer, el paraíso, el estado de inocencia, la caída, el diluvio y cuantas y tantas otras historias que muy posteriormente elaborará el judaísmo.

Los Libros de Moisés:

Capítulo I

El Pentateuco.

El Pentateuco.

Iniciamos nuestro recorrido a partir del Génesis, esto es desde el mismo origen de todas las cosas, desde la propia creación por Dios del mundo, de las cosas, de los hombres y estos relatos se encuentran en lo que es conocido como la Tora o Ley, por los judíos, o en la versión griega como el Pentateuco del griego “penta”, “cinco” y téukhoscaja o rollo” por “Los Cinco Rollos” que son los cinco primeros libros de la Biblia, todos ellos, considerando a Moisés como su autor.

No es que originariamente estos escritos hayan sido cinco libros distintos, sino que por la dificultad de su materialización estaban en cinco rollos separados, pero constituyen una sola unidad.

Génesis es el primer libro o rollo de este conjunto, seguido de Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio.

Por su integración de estos cinco libros, debe considerarse al Pentateuco como el libro bíblico de mayor extensión cronológica, comprendiendo desde el origen del mundo y la creación humana, contando para ello como año 1 y hasta la llegada a la Tierra Prometida y la muerte de Josué, lo que abarca un periodo de más de dos mil quinientos años.

Como ya hemos visto, y a lo que nos remitimos, hay certeza en que la atribución de su autoría a Moisés es simbólica, no tanto por la discutida existencia histórica de este personaje, y también por las fechas de su autoría, varios siglos después, sino por cuanto, según vimos en “Quienes escribieron la Biblia” hay consenso en que el Pentateuco en su forma actual es el resultado final de un largo proceso en el que se fundieron cuatro grandes tradiciones: Yahvista, Elohista, Deuteronomista  y Sacerdotal.

En un origen no había tal división en cinco libros, aunque la ortodoxia sostenedora de la autoría de Moisés alega que fue este quien así lo dispuso, y utilizan este argumento como favorable a la pretensión de su autoría.

En general se cree que esa división se impuso a partir de la traducción al griego con la Septuaginta en el 250 a.C. y esa creencia lo es en función que es a partir de esta versión de la LXX que se da a conocer la división en cinco libros y cada uno con los nombres de Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio, y en ese orden.

El nombre de Pentateuco, no se encuentra en los textos bíblicos, es una denominación que se les da a los primeros cinco libros o Libros de Moisés.

Los judíos no conocían esta denominación para sus primeros cinco libros, por el contrario, de los propios textos bíblicos surge como denominaban estas escrituras.

La Ley era la denominación más común para referenciar estos libros, y es así, con ese título, y sus variantes de El Libro de la Ley, o La Ley de Dios, es que se hace mención a estos textos sagrados en diferentes escritos hebreos, como en Josué 1. 8, y en 8. 34, así como en Edras 10. 3, en Nehemías 8. 2, 3, 7, 14, en 10. 29, 30, 35, 37, en 12. 44, en 13. 3, en 2 Crónicas 14. 3, en 31. 21, 28, 29, y en 33. 8, en 2 Reyes 22. 8,

También, y por entender que Moisés había sido su autor, se hacia referencia a estos textos con mención especial de su autor, y así se les llamaba, El libro de la ley de Moisés: en Nehemias 8. 1, y en 13. 1, El libro de Moisés: en Esdras 6. 18, y en 2 Crónicas 25. 4, y en 35. 12, El libro de la ley de Moisés: Josué. 8. 31, y en 23. 6, en 2 Reyes 14. 6, en Nehemias 8. 1, La ley de Moisés siervo de Dios: en Daniel 9. 11, y en Malaquías 3. 22, 

Siendo los libros que trataban sobre la Ley de Dios, se les llamaba también como La ley de Yahvé: en Esdras 7. 10, en 1 Crónicas 16. 40, en 2 Crónicas 31. 3, en 35. 26, El libro de la ley de Yahvé: en 2 Crónicas 17. 9, en 34. 14, o, El libro de la ley de Yahvé su Dios: en Nehemías 9. 3,  

No solo se hacía referencia en los textos judíos sobre estos primeros escritos bíblicos, sino que los cristianos, también hacían mención, aunque sin darle el título de Pentateuco, siendo en Lucas donde más se los menciona, y los llamaban: La Ley: en Mateo 12. 5, en Lucas 16. 16, y en Juan 7. 19, El libro de la ley: en Gálatas 3. 10, El libro de Moisés: en Marcos 12. 26, La ley de Moisés: en Lucas 2. 22, y en Juan 7. 23, La ley de Yahvé: en Lucas 2. 23, 24, 

El objetivo del Pentateuco es relatar, desde el inicio de los tiempos, la Creación por Dios, un Dios que los ha elegido, al pueblo de Israel, entre todas las sociedades humanas, como el Pueblo Elegido y protegido por Dios, la imposición de una Ley ética, civil y religiosa, así como la historia de ese especial pueblo, la búsqueda y obtención de la Tierra Prometida, y su relación con su Dios.

Quien se cree fue el introductor de este término y concepto, fue Orígenes (185 – 254) al llamar al Libro de Moisés como el Pentateuco de Moisés.

Otro autor cristiano que fue uno de los primeros en la utilización de este nombre fue Tertuliano en su obra “Contra Marción

Libro Primero de Moisés: El Génesis.

En una cosa están todas las vertientes judeo cristianas de acuerdo, y es en colocar como primer libro de todas y cada una de las Biblias, al Génesis, que es el considerado primer libro de Moisés del Pentateuco.

Este y otros tantos libros han sido atribuidos a Moisés como su autor, y se mantiene, pese a la demostración de su error, en esa misma tesitura.

Según la ortodoxia el Génesiscontiene los misterios de la prehistoria y los comienzos del reino de Dios sobre la tierra” así como “las grandes promesas mesiánicas con que Dios despertaba la esperanza de los patriarcas

Génesis, es una palabra griega que referencia la creación del Cosmos, y con ese nombre s conocido el primer libro de la Biblia, por el que iniciaremos nuestro recorrido, por cada uno de sus capítulos, cincuenta en total, y que abarcan desde la propia creación de Dios de los cielos y la tierra, del día y la noche, y de todo ser viviente, en especial del hombre y la mujer, los primeros seres humanos, Adán y Eva, sus hijos, la primer muerte, un fratricidio, la descendencia, la desobediencia humana, el enojo de Dios y la destrucción de todo ser viviente, el Diluvio, Noé y el Arca, los patriarcas, Abraham, Isaac y Jacob y todas sus aventuras y desventuras, la estadía en Egipto y concluye con la muerte de José, el hijo de Jacob y Raquel, aquel a quienes sus hermanos por celo quisieron matarlo y lo vendieron como esclavo.

La génesis del Génesis.

Pasaremos a través de los distintos capítulos a realizar un recorrido por estos textos hebreos sobre la creación del mundo por Dios, por lo que, nos permitimos insertar unos conceptos previos sobre cual es la base de estos relatos, que se nos han sido dados, a la civilización occidental y cristiana como verdaderos, literales, históricos y reales, y sin la más mínima posibilidad de su discusión, so pena de recibir, antiguamente y hasta no hace muchos siglos, directamente la eliminación física, y actualmente la sanción social, el descrédito, la infamia.

Esta de más decir, y lo iremos viendo, acreditando y argumentando, que todas las historias bíblicas son historias tomadas por los judíos de otras más ancestrales culturas, y al apropiarse, hacerlo pretendiendo su originalidad.

En apretadísima síntesis, las raíces de la mayoría de las historias del Viejo Testamento no son sino mitos paganos de antiguas culturas de la Mesopotamia y de Egipto.

No debemos olvidar que en realidad el Génesis de todo lo fue en el llamado Creciente fértil, en donde las aguas de los ríos Tigris y Éufrates, regaban esas tierras dando origen a las primeras civilizaciones, las cuales fueron elaborando, a través de milenios, sus historias, intentando explicar lo que, a esos hombres, en aquellas épocas les parecía inexplicable.

Nacieron mirando al cielo, y del cielo buscaron sus historias. Nacieron de la Tierra y a esa Madre llamaron Diosa.

Hay antecedentes de trabajos literarios completos de más de siete mil años a.C.

Uno de ellos, uno que ha sido casi calcado en los textos bíblicos es el Poema de Gilgamesh, considerada la obra literaria completa más antigua que sobrevivió, de donde se toma la creación del hombre y la mujer, el paraíso, el estado de inocencia, la inexistencia del mal y su aparición, el diluvio causado por la perversidad del hombre.

Muchas de las historias de ese poema épico fueron eventualmente incorporadas en el libro de Génesis, algunas de las historias prestadas del libro de Gilgamesh son la creación del hombre en un jardín paradisíaco, y, y la historia de un gran diluvio.

Veremos también como muchas de las historias judías, sobre todo, la de sus máximos exponentes, son tomadas de personajes reales de Egipto, como los casos de David y Salomón, de faraones egipcios, o el del mismo Moisés, con su parecido al faraón monoteísta Akehatón, y de su nacimiento tomado de la leyenda de Sargón, o el caso de José, tomada su historia de un viejo cuento egipcio.

Muchas historias prestadas, demasiados parecidos para pretender originalidad.

No se cuestionaría, en absoluto el hecho de las historias prestadas, siempre y cuando hubiera sinceridad y humildad en reconocer que, como no podía ser de otra manera que un pueblo toma de su entorno y contexto, y de los antecedentes las historias y las recrea haciéndolas suyas.

Lo errado de los textos bíblicos, en especial de la intolerante imposición cristiana, es la pretensión hegemónica de ser los únicos y verdaderos, y sus historias verdaderas y únicas, al punto que se llegó al absurdo intelectual de pretender justificar la existencia de historias anteriores a las suyas, sosteniendo la versión de la “Anticipación Diabólica” esto es que el diablo, sabiendo lo que venía, sobre todo en relación a Jesús como el Cristo, como el único y verdadero Cristo, se había anticipado, y había impuesto historias anteriores para que fueran confundidos posteriormente y no reconocieran la genuinidad de Jesús.

Continuaremos iniciándonos en La Creación en su versión bíblica y con anotaciones sobre El Origen como base de una creación científica, y las relaciones y enfrentamientos entre Ciencia y Religion, para luego dar paso a Los Dias de La Creación.

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